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Comienzo por decir que nunca he estado de acuerdo con la etiqueta de "centro" que nos endilgaron.
Compromiso ciudadano que es el movimiento en el que he militado activamente en Colombia, nunca se definió como "centro". Cuando el movimiento se creo, lo hizo bajo la base de tener un grupo de "principios" sobre lo cuales se construiría el proceso.
Cuando se convocaba a los ciudadanos a participar, se les entregaba un volante con los principios, el mensaje era claro, "si crees en lo mismo, te invitamos a sumarte y participar".
Nunca le preguntamos a nadie si era de derecha o izquierda, lo importante era que compartiese nuestra visión.
Así las cosas llegaron personas con muchas visiones, con ideas muy diferentes y con capacidades que cuando sumaron, crearon el sello que aun hoy nos distingue, somos un grupo de ciudadanos comprometidos con solucionar los problemas del país, no estamos dispuestos a traicionar nuestros principios para lograr nuestros objetivos y le apostamos a la educación y talento de las personas como motor de nuestra visión.
En algún punto entre las ultimas dos elecciones, nos pusieron en el "centro".
Creo que el asunto comenzó con la pregunta de si se era "Uribista o no". El profe Fajardo siempre contestaba "ni uribista ni antiuribista, estamos construyendo nuestro propio espacio".
En una realidad que comenzaba a ser polarizada, decir algo como esto generaba grandes molestias, sobre todo para aquellos que veían en la confrontación, su forma de generar atracción.
Hace un par de días, un usuario en Twitter creo un hilo, donde argumenta que "el centro no tiene nada que ofrecer a los votantes" . Esto me hizo pensar en la necesidad, luego de las pasadas elecciones, de plantear claramente que somos, que creemos y que deseamos, quienes militamos en Compromiso Ciudadano.
Esta claro que yo no puedo hablar por todo el mundo, pero como parte de un grupo coordinador en el exterior y como militante activo que ha participado en todos lo espacios y responsabilidades donde he podido apoyar, siento que me he ganado el derecho de opinar de forma constructiva, con la esperanza de generar conversación y sumar a los esfuerzos que muchas personas en el colectivo adelantan con el mismo fin.
Hace un tiempo escribí el por que yo no aceptaba la etiqueta de "tibio".
En mi nota propuse que de poder elegir, mejor me gustaría decir que sigo el "camino medio", termino tomado del budismo y que se refiere al "equilibrio", Buda dijo que se inspiro en la conversación de un maestro de citara con su alumno "no tenses demasiado la cuerda pues la puedes romper, pero no la sueltes mucho pues no dará la nota, debes encontrar el equilibrio perfecto, donde el sonido es armonioso", acotaba Siddhartha creando con ese precepto su escuela de pensamiento.
Creo pues por extensión, que Compromiso debe seguir el "camino medio". Creo que nos corresponde revisar los "principios" que nos convocaron y volver a generar un llamado a la ciudadanía.
En uno de los apartes del hilo de Twitter , el usuario argumenta que el "centro" defiende el status quo y no gusta de cambios radicales. Queda claro que la visión que él tiene de ese "centro" es equivalente al de la "tibieza", un grupo de personas sin posición ni propuestas, lo que contradice por completo la evidencia de los gobiernos de los lideres icónicos del mal llamado "centro", gente como Antanas Mockus, Sergio Fajardo o Alonso Salazar, quienes dieron ejemplo de grandes cambios, cambios institucionales y de políticas publicas disruptivas, que tuvieron tanta fuerza, que aun hoy se estudian en otros países y se usan como casos de estudio.
Creo pues importante dar un poco de contexto a la historia reciente de Compromiso Ciudadano y todo lo que a ocurrido en los últimos 23 años desde su fundación. Creo que haciéndolo ordenare mis recuerdos y creare la oportunidad para que otros compromisarios opinen y compartan sus ideas.
Sobre todo, creo que será una buena forma de plantear temas para el paso siguiente, el futuro de nuestro compromiso.
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